
Valentino Rossi rompe el mito: "Parece que vas a la pizzería que tenemos en
Tavullia". "Il Dottore" admitía que "me alegra por Marc Márquez, Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa
Es algo bueno.
Pero a mí no me gustaría".
Valentino Rossi, uno de los pilotos más legendarios en la historia del motociclismo, rompe con una tradición que otros campeones ven como un honor: dar nombre a una curva en un circuito.
En 219, durante una rueda de prensa, Il Dottore fue interrogado sobre esta posibilidad.
Su respuesta, llena de humor, dejó clara su postura: no le interesa en absoluto tener una curva con su nombre.
En el Mundial de Motociclismo, grandes pilotos han sido honrados de esta forma.
Marc Márquez tiene la curva 1 de MotorLand Aragón.
Jorge Lorenzo da nombre a la curva 1 del Circuito de Jerez - Ángel Nieto.
Dani Pedrosa, a la 6 de ese mismo trazado.
Casey Stoner, a la de Phillip Island.
Alex Crivillé, a la 11 de Jerez.
Son reconocimientos que perpetúan el legado de quienes marcaron época en este deporte.
Pero el de Tavullia, que cuenta con nueve títulos mundiales y una afición inquebrantable, no quiere seguir ese camino.
"Me alegra por Pedrosa, por Lorenzo, por Márquez.
Es algo bueno.
Pero a mí no me gustaría ver una curva que se llamara Valentino Rossi", declaró en aquel momento con una sonrisa.
Para Rossi, el encanto de una curva no debería estar ligado al nombre de una persona, por importante que sea en el deporte.
Él prefiere los nombres clásicos, con historia, que evocan sensaciones únicas a los aficionados.
Y lo explicó con ejemplos que hablan por sí solos: "Si piensas en la Arrabbiata Mugello.
, la Dry Sack Jerez.
, la Lesmo 1 Monza.
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son nombres de curvas".
Ahí fue cuando lanzó la frase que ya se hizo viral entre sus seguidores: "Si dices 'llegar a la Valentino Rossi' parece que vas a un restaurante, a la pizzería que tenemos en Tavullia".
La comparación, simpática y cercana, refleja el carácter del 46.
Con los años, el italiano se ha convertido no solo en una leyenda del motociclismo, sino también en un icono cultural.
Su pueblo natal, Tavullia, es destino de peregrinación para sus fans, y su famosa pizzería allí es parte del atractivo.
Lejos de querer construir un legado basado en homenajes formales, Rossi sigue siendo fiel a sí mismo.
Ha preferido que su huella se mantenga viva en los recuerdos, en las carreras inolvidables y en el cariño del público.
Para él, los nombres de las curvas deben tener "más magia" que el de un piloto.
Y aunque seguramente haya circuitos dispuestos a rendirle ese tributo, Valentino Rossi seguirá diciendo que no