Menu

Lo más importante que hay que saber sobre los radares de velocidad es cómo

Evitar ser multado. Los radares se instalan tanto en calles y carreteras como en pueblos y ciudades, por lo que siempre son útiles algunos consejos

Los radares fijos llevan décadas instalados en autopistas y, más recientemente, en carreteras secundarias.

Los radares fijos no garantizan el control de la velocidad en todos los tramos de autopistas y carreteras, ya que son dispositivos que controlan automáticamente la velocidad sólo en determinados puntos kilométricos.

Esta solución, que ha funcionado en el pasado, empieza a quedar obsoleta porque todo el mundo conoce la ubicación de los radares, gracias a apps instaladas en smartphones o gracias a Google Maps La DGT también ha publicado un listado con su ubicación.

Estas apps nos alertan de radares fijos e incluso móviles, por lo que al llegar a un punto conflictivo frenamos, nos adaptamos a la velocidad legal y al pasar el radar volvemos a acelerar.

Por lo tanto, para que los conductores circulen siempre a la misma velocidad por autopistas y autovías, en lugar de radares instalados en puntos kilométricos se necesita otro tipo de radar.

Para saber qué hacer en una zona con radar de tramo, primero hay que saber cómo funciona.

El mal llamado radar seccional no es en realidad un radar.

A primera vista resulta engañoso y sorprendente: el radar que vigila la velocidad kilométrica es un dispositivo compuesto por un emisor de ondas y una cámara de alta resolución y alta velocidad.

Las ondas emitidas por el emisor rebotan en el vehículo y vuelven al radar, y la velocidad del vehículo se determina calculando la diferencia de tiempo entre las ondas emitidas y las ondas rebotadas.

Si esta velocidad es superior a la permitida legalmente, el dispositivo activa automáticamente la cámara integrada para fotografiar el vehículo infractor y su matrícula.

Si se supera el límite de velocidad, el dispositivo activa automáticamente la cámara incorporada y toma una fotografía del vehículo infractor y su matrícula.

Como su nombre indica, el dispositivo vigila un tramo de carretera, como una autopista o autovía, en lugar de un único punto.

Este tramo puede ser tan corto como 1 km y tan largo como 10-15 km.

Cómo funciona un radar de velocidad', Revista Trfico.

El mecanismo es sencillo.

Si el tramo vigilado es de 2 km y la velocidad máxima permitida es de 60 km/h, el tiempo mínimo en esta distancia es de dos minutos.

Para controlar el tiempo que tarda cada vehículo al principio del tramo radar, se instala una cámara de matrícula y se registran la matrícula y el tiempo de tránsito.

Hay otra cámara al final de la zona controlada, que también registra la matrícula y el momento exacto en que la cámara lee los datos.

Si el tiempo es inferior al tiempo mínimo calculado por el sistema, se aplica un error y el sistema emite el informe correspondiente.

Si el tiempo es conocido, el sistema emite el informe correspondiente.

El primer consejo importante para evitar ser multado en las zonas de velocidad es, por supuesto, respetar el límite máximo de velocidad.

Pero supongamos que te desvías… si entras en un radar de tráfico a una velocidad superior a la permitida por la ley, el sistema está diseñado para reducir tu velocidad y mantenerte por debajo de la velocidad máxima para ese tramo.

Asimismo, si circula con exceso de velocidad en un tramo de velocidad controlada de una autovía, autopista o vía pública, debe conducir a la velocidad indicada o por debajo de ella en la medida de lo posible.

Sin embargo, si tiene la suerte de encontrar una gasolinera en ese tramo, entre en ella y pare un par de minutos.

Si hay un radar de tráfico en el túnel y además te das cuenta de que vas “demasiado rápido“, no tienes elección.

Lo único que puedes hacer para evitar una multa es conducir por debajo del límite de velocidad el mayor tiempo posible.

Debes tener cuidado de no conducir demasiado despacio, ya que no debes obstaculizar a otros conductores.

No puede detenerse en los túneles, ya que es claramente peligroso y está prohibido.

Los nuevos radares están más extendidos, lo que significa que el tradicional radar que controla la velocidad en un único punto desaparecerá, obligándonos a ser más precavidos y a controlar nuestra velocidad en todo momento, ya sea en ciudad, en carretera o en autopista