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El declive de Japón en el Campeonato del Mundo de MotoGP

La historia tiene ciclos -en determinados momentos del año afloran las peculiaridades de una época concreta y el reloj pasa linealmente de una a otra- y el Campeonato del Mundo de MotoGP tiene su propio ciclo, con los europeos demostrando su valía en los últimos años, y con los japoneses en declive, los europeos han A la cabeza Nadie puede negar que algo ha cambiado en el panorama de la velocidad desde mediados de los 70, cuando Yamaha tomó el relevo de MV Agusta en 1974 y ganó su primer campeonato de constructores

Ese año Phil Read ganó el último título de pilotos bajo la marca del Conde Agusta, y a partir de la temporada siguiente los rodadores japoneses empezaron a ganar tanto el título de pilotos como el de constructores.

Curiosamente, fue el ex italiano Giacomo Agostini quien dio la corona a Yamaha, que ganó los títulos de pilotos y constructores.

La AJS ganó el primer Campeonato del Mundo en 1949, Norton conquistó varios títulos y, sobre todo, Gilera, y en especial la mencionada MV Agusta, reinaron.

Los últimos años 70, 80 y 90 fueron un largo periodo de acentos orientales, en el que Honda-Yamaha y Suzuki se repartieron la gloria, y sólo en 2007 Ducati, de la mano de Stoner, logró revivir los viejos éxitos de las veteranas marcas occidentales.

Si bien es cierto que Casiva dio sus primeros pasos, no logró la regularidad necesaria para ganar los grandes premios.

Este año servirá como pequeño aviso de lo que está ocurriendo en la actualidad.

Ducati domina desde 2020, ganando los dos últimos títulos de constructores.

Aprilia está aprovechando al máximo sus concesiones y construyendo una estructura fuerte, mientras que KTM, a pesar de una caída en su rendimiento este año, sigue estando por encima de constructores como Suzuki y Honda.

Antaño una marca poderosa con alas doradas, Honda recorre ahora los circuitos de medio mundo con más pena que gloria.

Más aún, se ha convertido en una trituradora de pilotos.

El título de Quattararo tapó parte de los resultados de Yamaha, pero el resto de pilotos se han desvanecido por completo.

Mir ganó el título en 2020, pero Suzuki no consiguió el de constructores, que fue a parar a Ducati.

Las razones son variadas, pero las económicas y las estratégicas parecen ser las principales.

La razón económica fue que la pandemia había dejado un gran agujero en las finanzas de la compañía y la inversión se había resentido, lo que había paralizado un poco la investigación y el desarrollo, especialmente entre los japoneses.

Sea como fuere, en el caso de Honda en particular, todo parece depender de un piloto.

¿Qué piloto cree usted? En cierto modo, la situación es similar a la de Yamaha, sólo que el diablo francés parece estar aclarando las cosas.

Y Aprilia tiene otra máquina difícil de batir, un veterano aspirante al título y otro piloto que cada vez está más cerca de la victoria.

Ducati.

La marca de Borgo Panigale sigue siendo aspirante al título, líder de constructores y más codiciada que nadie.

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