
Marc Márquez explica la razón de su perfecta adaptación a la Ducati GP2 y
Advierte para Aragón: "Austin también me iba bien y me fui sin nada". El piloto de Cervera estuvo presente en la inauguración de Ducati Barcelona en Sant Quirze del Vallés
Marc Márquez llega a una pista talismán para seguir acercándose a un título de MotoGP con el que puede culminar una de las historias de superación más bonitas del deporte en los últimos años.
Aragón es precisamente la cita donde el año pasado consiguió acabar con una sequía de triunfos que se alargaba 14 días.
Esa victoria con el equipo Gresini en Alcañiz no la olvidará nunca.
Una temporada después llega con los colores del Ducati oficial y liderando el Mundial con una ventaja de 24 puntos sobre su hermano Álex.
Antes de ir hacia Motorland, el de Cervera estuvo presente en la inauguración del concesionario Ducati Barcelona en Sant Quirze del Vallés y en un encuentro con los medios valoró la importancia de mantener los pies en el suelo.
"Creo que la tónica de los últimos cursos ha sido que Álex ha sido el rival más duro, Pecco también ha estado muy cerca, aunque en los últimos cursos ha tenido mala suerte y no han acabado de hacer resultados por caídas.
Y nada, veremos cómo va, pero es un fin de semana de descanso en el que, a priori, es un buen circuito para mí, pero también lo era Austin, donde no conseguí nada, acabamos con un cero el domingo, así que toca estar más concentrados que nunca y tener ese extra de concentración.
Así que prudencia y precaución", dijo en el evento con Marc presente.
"No ha pasado exactamente un año, pero sí que después del año pasado, donde conseguí mi primera victoria en Aragón, creo que esto fue un punto de inflexión.
Fue el objetivo que venía persiguiendo, volver a ganar una carrera.
¿Quién lo diría después de ganar tantas? Sí, yo creo que fue el objetivo, pero llevaba mucho tiempo sin ganar, muchos días, y era el objetivo que nos habíamos marcado, pero tocaban los pasos correspondientes para intentar conseguirlo.
Lo conseguimos en Aragón", expresó.
Mientras Pecco está sufriendo de lo lindo con la GP2, a Marc parece que no hay ninguna faceta de la moto italiana que le sorprenda.
Pero el ocho veces campeón del mundo no descarta al italiano, aunque admite que su mayor rival es Álex.
"Sí, la confianza es buena, me siento bien, me siento cómodo.
Desde el primer momento que me voy a subir, puede ser el hecho de venir desde el año pasado a la 2 y subir directamente a la 2, bueno, es una 24, al final es la misma moto que está conduciendo Álex, me he sentido cómodo y eso hace que la confianza cada vez crezca más.
Pero también, como se ha visto, esta confianza a veces puede cometer o llevar algún error inesperado".
"El tema es que no hemos cumplido ni un tercio del campeonato, así que todavía hay muchos puntos en juego.
Ahora un fin de semana es muy largo, está la sprint race, está la carrera larga, sí, 7 puntos más o menos, parecen muchos, pero no son los 7 puntos de antes, sino que hay muchos más en juego, así que todavía pueden pasar muchas cosas, pero de momento el rival que está siendo más constante y más rápido en la pista es Álex, pero eso puede cambiar de un gran premio para el otro", expresó para finalizar