
La cuenta saldada de Gigi Dall'Igna
Después de ver a sus motos ganar las categorías de 125 cc, 250 cc y Superbike era una obsesión cerrar el círculo con el título de pilotos en MotoGP
En el paddock del Mundial hay unanimidad a la hora de definir la Desmosedici de Ducati como la moto más competitiva de la categoría. Un mérito que se le achaca a Gigi dall’Igna, el carismático ingeniero que está al frente de Reparto Corse de la fábrica de Borgo Panigale. Dall’Igna es un ganador compulsivo, para bien y para mal. Ganar es su ‘leitmotiv’, o razón de ser, para trabajar de forma incansable; no ganar directamente no es aceptable en ningún caso.Con el título conquistado por Pecco Bagnaia en Valencia, Dall’Igna cierra su libro de ‘Cuentas Pendientes’. Después de ver a sus motos ganar las categorías de 125 cc, 250 cc y Superbike, cerrar el círculo coronándose en MotoGP pasó a ser su obsesión. Para eso convenció a Audi -dueña de Ducati- para desembolsar una fortuna para fichar a Jorge Lorenzo.El resultado no fue el esperado. Un fiasco que llevó a un recorte sustancial en la partida destinada a pilotos. Un inesperado paso adelante de Andrea Dovizioso llevó a Ducati a terminar durante tres temporadas seguidas segundos en el campeonato por detrás del mejor Marc Márquez. Pero para Dall’Igna hacer segundo es perder.Siguiendo un puro planteamiento de ingeniero, pasó a gestionar la situación aplicando una máxima tan simple como: ‘si no tengo el mejor piloto, lo tengo que compensar haciendo la mejor moto’. Y este planteamiento nos devuelve a la frase con la que hemos abierto este artículo.La primera fase para llegar a construir la moto referencia de MotoGP fue la de proveer a su motor de músculo de culturista, diseñado el motor más potente de la categoría. Una vez logrado, pasó a la fase dos, aligerar la moto para dejarla en el peso mínimo.“Ha sido una trayectoria que comenzó en 2015. En ningún momento ha habido una gran revolución”, aclara Dall’Igna que no cree en soluciones milagrosas sino en el trabajo metódico y sobre todo, ordenado. “Hemos ido corrigiendo pequeños cosas que individualmente no eran importantes, pero que alineadas una tras otra… Es mi filosofía: dedicar la misma atención a cada detalle para tener al final un mosaico perfecto”.Gigi ...
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